El Poder del Convencimiento en el Escrito
Querido amigo: Tiene usted razón. Mis cartas anteriores, con sus vagas hipótesis sobre la vocación literaria y la fuente de donde brotan los temas de un novelista, así como mis zoológicas alegorías -la solitaria y el catoblepas-, pecan de abstractas y tienen la incómoda característica de ser inverificables. De modo...